“Nadie es profeta en su tierra”, dice la frase popular que bien puede trasladarse a los distintos ámbitos en que alguien se desempeña. Pero también parece ser la manera en que el concejal Lisandro Mársico se siente por estos días.

Luego de una agitada semana en donde se lo vio en el centro de la escena por su aparente pulcritud política aparecieron desde donde menos lo esperaba, del Partido Demócrata Progresista rafaelino, algunas versiones que se trasladaron al Panorama Político del Diario La Opinión de nuestra ciudad.

El medio cuenta que “fue el concejal demoprogresista, Lisandro Mársico, el único que desistió una vez que asumió en diciembre de percibir este reintegro (por la devolución del 60% del Impuesto a las Ganancias), lo que le otorgó mayor `capacidad ética´ para cuestionar a todos los que sí aceptaron cobrar, incluso sus socios del bloque del Frente Progresista”.

Luego recuerda que el diario rafaelino que “hace poco más de un mes también renunciaron el radical Germán Bottero y el macrista Lalo Bonino, pero fue tarde en la dimensión de los gestos, ya habían pecado”.

“Mársico buscó capitalizar al máximo esta situación en declaraciones por aquí y por allá. Esta sobre exposición que siempre busca, sin embargo, disparó pequeñas broncas tanto al interior de su espacio como hacia afuera”.

Sucede que “hay dirigentes que recuerdan que Mársico había sugerido en una reunión con concejales que sería importante cobrar la devolución para compensar los aportes que debía hacer al partido, al PDP (que salen de su sueldo de concejal)”. El concejal se apoyó en notas periodísticas realizadas por personas que no son profesionales.

Mársico “repitió esta posición en un encuentro de la Mesa del Frente Progresista: `Como su partido se opuso a que cobre el reintegro, tuvo que dar marcha atrás´, dijo uno de los participantes de aquel encuentro. Otro dirigente también le dijo cara a cara, mientras aún se debatía qué actitud debía adoptar, que si cobraba ese dinero `sería vergonzoso´”.

"Resulta que ahora nos quiere dar lecciones de moral", sostuvo la fuente de Diario La Opinión. Una fuente consultada por Diario Primicia adelantó que “hay mucho más de él. Está lejos de ser Luis Peretti. Es un oportunista y sabemos que en cualquier momento deja el PDP”.

“Del otro lado de la vereda política no descartan una contraofensiva del edil pedepista”. “Recuerdan que no cumplía todas las horas cuando se desempeñaba en la función pública en una localidad vecina ni tampoco en un organismo provincial con oficinas en avenida Aristóbulo del Valle”.

“Como se verá, a medida que Mársico buscó rentabilizar su momento surgieron hacia adentro algunas resistencias internas y externas que, tal vez, tengan nuevas manifestaciones en los próximos días”.

Asimismo, un allegado a una universidad de Rafaela manifestó su malestar porque “en 2013 cobró casi dos meses de sueldo sin trabajar. Dejó al hoy fiscal de Esperanza a cargo de la cátedra mientras viajaba por Estados Unidos”.

Mársico sabe que “no es profeta en su tierra” y por eso empieza a acercarse a un vínculo con el PRO- Radicalismo, que a los referentes de estos espacios le trajo más de un dolor de cabeza y no ven con buenos ojos el vínculo con el “bocón” como le dicen por lo bajo en el Concejo Municipal de Rafaela.