Estuvieron presentes en el encuentro el intendente Luis Castellano, sus pares Alois Henne, Davide Sordella y Juan Miguel Sánchez Cabezuelo; funcionarios del gobierno local, legisladores, autoridades y representantes institucionales de la ciudad, y miembros de las comitivas extranjeras.

Al dirigirse a los presentes, Henne destacó que "lo que firmamos en 1981 con Juan Carlos Borio sigue inpregnando esta relación entre las ciudades". En tal sentido, el funcionario alemán subrayó la relevancia de esta clase de hermanamientos para fomentar la paz en el mundo. Además resaltó que las tres columnas que sostienen la amistad entre Rafaela y Sigmaringendorf son las relaciones entre familias, personas e instituciones, la cultura y los intercambios entre jóvenes y estudiantes.

Sordella, por su parte, hizo hincapié en la gran labor de sus antecesores por el Hermanamiento y la responsabilidad que significa para él dar continuidad al vínculo establecido. También reflexionó sobre el reencuentro de lazos familiares, cortados por la emigración hace tantos años, que hoy son reanudados gracias a esta hermandad. Asimismo, señaló que los representantes de las tres comunidades de Sigmaringendorf, Fossano y Carcabuey, tuvieron que recorrer 10 mil kilómetros para encontrarse en Rafaela y notar aquí que ellos, como europeos, también son hermanos entre sí.

"Estamos en un momento histórico", declaró luego Sánchez Cabezuelo, quien retomó los conceptos de Sordella para afirmar que ahora cuatro ciudades, tomadas de la mano, marcharán juntas hacia el futuro, y exhortó a las nuevas generaciones que se sumen a esta unión, con el mismo espíritu con que lo hicieron los antecesores.

"Estamos en un mundo que se va desgranando y debemos recuperar valores de unión", expresó Castellano en el cierre de la ronda de discursos. "Lo que sucede en Europa también sucede en la Argentina", agregó, en alusión a lo que dijeron Sordella y Sánchez Cabezuelo previamente.

"Estos hermanamientos sirven también para mirarnos a nosotros mismos, ver lo que somos y ver hacia dónde vamos; hace un tiempo comenzamos a hablar de los 150 años de Rafaela, que se acercan, y este es un gran momento para comenzar a proyectar nuevas ideas, tomar el gran legado para que nosotros y los que vengan luego, los jóvenes, reciban y potencien ese legado", concluyó.