En esta ocasión, se habló del proceso para la apertura de las celebraciones religiosas en el marco de la nueva normalidad, coincidiendo todos los presentes, en la importancia de la fe para la salud e integridad psico-espiritual del ser humano.

Castellano, por su parte, les comentó sobre el procedimiento a seguir para la presentación de los protocolos sanitarios correspondientes ante el Comité de Emergencia del Departamento Castellanos, para su posterior aprobación por el Gobierno de la Provincia. También hablaron de los horarios permitidos y los cuidados a tener en cuenta.

Los representantes de las iglesias plantearon la necesidad de contemplar el espacio de cada una de las celebraciones para determinar la cantidad de fieles que pueden asistir, y no regirse solamente por un número de diez personas. En este sentido, solicitaron un tratamiento similar al de los bares y restaurantes para establecer el factor de ocupación.

Al respecto, el intendente Castellano destacó que más allá de la fijación de un número de personas determinado, se debe considerar la ocupación de acuerdo a los metros cuadrados, para poder cumplir con el distanciamiento interpersonal recomendado.

El encuentro fue muy valorado por los participantes, quienes agradecieron el espacio de diálogo e intercambio para expresar sus puntos de vista.

Por último, destacaron la situación privilegiada de la que goza la ciudad al permanecer durante 60 días sin casos positivos de COVID-19 y apelaron a promover instancias de unión entre los argentinos y argentinas.